Sergio Mazzei:
... " Mi trabajo, por lo tanto, consiste en ayudar a las personas a encontrar respuestas más funcionales y/u otras maneras
de ver la propia condición con el propósito de cerrar, o por lo menos de mejorar , lo que ha quedado inconcluso y
no integrado en la propia vida.
En el taller que propongo sobre la muerte, la gestalt abierta es la vida misma.
En general, cuando se hacen “grupos sobre la muerte” se proponen enseñanzas y experiencias relativas a la muerte de los otros, familiares, amigos, pacientes, etc. , y la intención primaria es la de encontrar una manera de ponerse en contacto y en relación
con estas personas para ayudarlas, sostenerlas y acompañarlas a través de su propio proceso de acercamiento a la muerte.
Este taller, en cambio, no tiene nada que ver con la muerte de los otros, sino más bien con la propia muerte,
o por lo menos con el propio imaginario respecto a ella.
Este tipo de meditación sobre la propia muerte, sobre el prepararse a morir, generalmente, por lo menos en nuestra cultura occidental, es raramente objeto de interés particular. Vivimos en una sociedad que adora la juventud, la belleza y la sexualidad, mientras que la muerte es aquello que se encuentra exactamente en el lado opuesto: es la vejez, la fealdad, el final de la fuerza,
de la potencia y, entonces, depresiva, decadente, melancólica. Es, por lo tanto, una experiencia que se teme y de la que
la gente huye.
Mi intención en el taller es la de proponerles morir , por lo menos una vez, en su imaginación, antes de morir de verdad:
una especie de preparación al evento.
En el taller se realizarán prácticas experienciales, visualizaciones, meditaciones, rituales y
trabajos individuales de Body Work que tienen la función de poner a los individuos en contacto con la experiencia
del propio imaginario y de la conciencia de sí mismo en relación con el evento de la propia muerte.
Un aspecto importante de las prácticas meditativas sobre la propia muerte es la observación de los propios “bloqueos pasionales”,
o sea, de aquellas tendencias que se fijan y nos llevan a pensamientos y acciones destructivas.
En fin como Buda decía: “ Si la huella del elefante, entre todas las huellas, es la más grande, así entre todas las meditaciones,
la de la muerte es la suprema”.
de la potencia y, entonces, depresiva, decadente, melancólica. Es, por lo tanto, una experiencia que se teme y de la que
la gente huye.
Mi intención en el taller es la de proponerles morir , por lo menos una vez, en su imaginación, antes de morir de verdad:
una especie de preparación al evento.
En el taller se realizarán prácticas experienciales, visualizaciones, meditaciones, rituales y
trabajos individuales de Body Work que tienen la función de poner a los individuos en contacto con la experiencia
del propio imaginario y de la conciencia de sí mismo en relación con el evento de la propia muerte.
Un aspecto importante de las prácticas meditativas sobre la propia muerte es la observación de los propios “bloqueos pasionales”,
o sea, de aquellas tendencias que se fijan y nos llevan a pensamientos y acciones destructivas.
En fin como Buda decía: “ Si la huella del elefante, entre todas las huellas, es la más grande, así entre todas las meditaciones,
la de la muerte es la suprema”.